lunes, 2 de mayo de 2011


Porque, alguna vez, creyó tener su sol
y este se fue en busca de otro amor.
Y su alma, lejos de parecer hielo,
Ante la falta de esa luz, pensó:

"Por qué habría de angustiarme tras su ausencia?
Si aquel sol, como yo, se formó de nuestro amor"
Cerró la puerta con suma prudencia
Y espera otra estrella para fundir de a dos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario